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Sobre el Cartel de las ferias colombinas de 2011 y la historia de los carteles en general.
El Cartel de las ferias colombinas de 2011 de es un medio de la publicidad. Consiste en una laminilla de papel, cartón o bien otro material que se graba con algún género de mensaje visual (texto, imágenes y todo tipo de recursos gráficos) que sirve de noticia para propagar una información o bien promocionar un servicio, un acontecimiento, una reivindicación o bien cualquier tipo de causa.
Acostumbran a formar parte de una campaña publicitaria más amplia. Si son de gran tamaño se denominan valla promocional.
En distribución, los carteles de las fiestas colombinas de 2011 se ponen tanto en el interior de un establecimiento comercial como en su exterior o en el escaparate, con el fin de anunciar los espectáculos y atracciones previstas en el año en desarrollo.
Los carteles asimismo se emplean para colocar el nombre de departamentos y secciones con el objetivo de orientar a los clientes. En ambos casos, acostumbran a incluir el logo y los logos corporativos de la cadena de comercialización.
Los carteles se utilizan en el marketing para difundir y apoyar campañas comerciales en el establecimiento (como las rebajas o promoción de todo tipo).
Generalmente, se ponen pegados en las paredes, muebles o cabeceras de góndola, sobre pies metálicos o bien suspendidos del techo.
Los carteles también sirven para anunciar espectáculos o eventos culturales (conciertos, recitales, encuentros deportivos, películas de cine, obras de teatro, ferias colombinas, exposiciones o cartel taurino.
En dichos casos, se encolan en las paredes de las edificaciones donde tendrán sitio el evento u otros lugares de la urbe habilitados al efecto. (Circuito colombino)
Además de la cartelería publicitaria, existe una larga tradición de cartelería de publicidad política, que se emplea con profusión a lo largo de las campañas electorales, donde impresos de todo tamaño (folletos, carteles y vallas promocionales) difunden las fotos de los aspirantes, el logo de los partidos y los eslóganes electorales.
El cartelismo político fue especialmente esencial en la primera mitad del siglo XX, sobre todo durante el periodo de entreguerras (1914-mil novecientos dieciocho). El cartelismo bélico fue muy utilizado en ambas guerras mundiales.
Póster es una palabra española de origen inglés (poster, sin tilde), aceptada en el DRAE como término para referirse a los carteles que han perdido su inicial función promocional para proporcionar solamente como medio de expresión artística.
Como cartel colombino, un póster está, diseñado para ser puesto en una pared o bien en una superficie vertical.
En él se incluyen imágenes de cualquier clase (grabados, dibujos o pinturas de cualquier técnica, fotografías, etc.), elementos gráficos y textos (cuya predisposición y tipografía tienen una función esencial).
Primordialmente son y han sido un medio de publicidad, queja y para lanzar mensajes de todo tipo. También son utilizados para reproducir obras artísticas, resultando en una forma económica de decoración, que transforma a las obras de arte más famosas en objetos de consumo de masas. Otros sirven como recurso educativo en el entorno escolar.
Los carteles y pósteres viejos o bien creados por artistas de fama, alcanzan en el mercado altos precios, al ser de interés para el coleccionismo. Esto sirve para trabajos como descripciones de artistas conocidos
La gran revolución del cartelismo llegó con la aplicación de la litografía y la utilización del color, que dejaron ilustrar de una manera vibrante y con mayor fuerza.
En la década de 1960, con el pop art, los movimientos contraculturales y juveniles, se utilizaron ampliamente los carteles y pósteres.
Desde la Primera Guerra Mundial los carteles de reclutamiento y de publicidad política se volvieron muy frecuentes, y muchos persistieron en las conciencias nacionales, como el estadounidense I Want You (El Tío Sam te necesita), o bien el británico Loose Lips Sink Ships (Hablar sin cuidado hunde navíos), que advertía de los espías.
Los totalitarismos del periodo de entreguerras (Unión Soviética, Italia fascista, Alemania nacionalsocialista) emplearon el cartel como un medio eficaz de adoctrinamiento de la población. La guerra civil española presenció una superación creativa de cartelistas en ambos bandos.
Las imágenes de pin-ups desconocidas o bien conocidas, como Betty Grable y Jane Russell, se reproducían incluso como decoración de bombas y aviones a lo largo de la S. Guerra Mundial, con la intención de elevar la moral de los soldados.
Convertidas en pósteres (cheesecake poster o bien "póster de queso"), pasaron a ser un objeto de consumo de jóvenes en las décadas siguientes, si bien para la temporada de la Guerra de Vietnam ya había disminuido su empleo bélico.
En su parte civil, vinculada al fenómeno fan, prosiguieron siendo comunes hasta la década de 1980 con las figuras de la TV de Estados Unidos.
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