El Museo de Huelva ofrece desde este viernes la exposición 'Esculturas de la compilación de Hermosas Artes del Museo de Huelva', una muestra que exhibe todas y cada una de las piezas escultóricas que frecuentemente se preservan en los fondos de reserva del Museo. Comisariada por E. C. M., conservador del espacio, la muestra continuará abierta hasta finales de septiembre en las salas tres y cuatro.

En un museo la compilación es consecuencia de la propia historia de la corporación. En el caso de Huelva, la Desamortización de recursos eclesiásticos de mil ochocientos treinta y cinco-mil ochocientos treinta y seis no cristalizó en el Museo que el Estado contemplaba, por lo menos en teoría, en todas y cada una de las capitales provinciales y se perdió la posibilidad de alimentarse de las obras de arte de los 25 conventos masculinos de la provincia y de otras piezas que hubiesen podido añadirse a lo largo de todo el siglo XIX, ha informado la Junta en una nota.

Va a haber que aguardar hasta mil novecientos veintiuno a fin de que se inaugure el Museo Provincial de Preciosas Artes, que por desgracia cierra sus puertas en mil novecientos treinta y cinco, pasando de largo de este modo otra opción de acreciento patrimonial: la derivada de la integración de recursos procedentes del patrimonio eclesiástico salvado de los acontencimientos del verano de mil novecientos treinta y seis.

Cuando en mil novecientos setenta y tres abre sus puertas el Museo Provincial de Huelva su primitiva compilación solo contaba con 3 estatuas a las que se sumaron las adquiridas por el Ministerio de Educación y los depósitos de otros museos.

Desde ese momento solo ciertas loables, y escasas, donaciones han ido acrecentando su número, mas en contraparte en los últimos tiempos se han restaurado diez piezas con lo que las posibilidades expositivas han mejorado y dejan ofrecer, por vez primera, una visión de conjunto.

Como la compilación adolece de lagunas cronológicas y de escuela, más que presentar un panorama congruente de la historia de la estatua, la exposición pretende patentizar la calidad y el vigor plástico de tallas, mármoles, terracotas y bronces, con un extenso arco cronológico que engloba desde la Edad Media hasta la actualidad.

La compilación se comienza con 4 piezas medievales entre aquéllas que resaltan 2 preciosas 'Vírgenes de Majestad' del siglo XIII, de escuela castellana la de temporada románica y navarro-aragonesa la gótica, obra esta última de gran delicadez y del mismo estilo que un 'Apóstol' —uno de los evangelistas posiblemente— del siglo XIV, entre otras imágenes.

La temática no religiosa aparece por vez primera en la compilación por medio de J. Alcoverro y Amorós con su obra 'En la pelea' (mil ochocientos noventa y siete), bronce muy narrativo y de calidad pese a que ciertos críticos atribuyeron a su autor un exceso de realismo. A. Pinto Soldán natural de la Palma del Condado, es autor de 'Modestia', efectuada en mil novecientos doce en la ciudad de Roma, donde radicaba su autor, este precioso y frágil trabajo es probablemente un retrato de la hija del artista.

Con 'Polo', un precioso busto de bronce que hunde sus raíces en la estatuaria griega consiguió J. Costa y Vaqué un primer premio en la Exposición Nacional de Preciosas Artes de mil novecientos veintiocho. Muy representativos de la plástica de esos años son los retratos de la pintora Ascensión Hernanz, de mil novecientos cincuenta y dos el debido a J. Polo Velasco y de mil novecientos cuarenta y nueve el de C. J. Serrano, que su autora usó como boceto para 'Eva', que ganó ese año el Premio del Círculo de Preciosas Artes de la villa de Madrid.

Por donación ha ingresado en el Museo un pequeño conjunto escultórico representando a la 'Virgen de las Angustias', efectuado en mil novecientos cincuenta y ocho, y que pese a ser boceto es obra deliciosa y ricamente policromada del imaginero onubense A. L. O.. El recorrido de la compilación concluye con otro retrato de artista, el del pintor J. M. Franco, efectuado en terracota por su hijo A. Franco en mil novecientos noventa y cuatro.

En el verano de dos mil diez se expuso de forma global por vez primera el conjunto escultórico del Museo de Huelva gracias ambiciosa campaña de restauración de piezas que se venía efectuando desde años atrás permitía presentar con dignidad la compilación.

5 piezas más

5 años después las Estatuas de la Compilación de BB.AA. son de nuevo expuestas, sirviendo la ocasión para presentar 5 piezas que no estuvieron presentes en el año 2010: San J. Bautista y Soporte italiano de mármol con decoración tallada y retratos de A. Herrero y Mariagus M. por A. L. O. y figura masculina del siglo XIX de inspiración tradicional.

Otras 4 obras, que en dos mil diez se expusieron sin restaurar, lucen esta vez en un estado óptimo: 4 tallas de vírgenes —dos de estilo románico, una renacentista y otra neoclásica— y una imagen de San S. del siglo XVI, que ya fue pieza del mes a principios del presente año. En rutas ocasiones el proceso fue financiado liberalmente por la Compañía De España de Petróleos Cepsa.

Para finalizar, es necesario resaltar el pedestal italiano del siglo XVIII, esencial pieza —completamente inédita— que hasta el momento ha formado una parte de la Sección de Arqueología y que adquiere su sentido al incorporarse a la Sección de Preciosas Artes del Museo.

Ingresó en mil novecientos setenta y tres así como el resto de la compilación del Museo de Riotinto y su primera procedencia es una incógnita pudiendo imaginarse que llegase a las Reales Minas en la segunda mitad del siglo XVIII, cuando eran dirigidas por T. S., si bien asimismo posiblemente fuera aportada en el siglo siguiente por la compañía británica.