El Consejo de Ministros ha acordado este viernes otorgar un suplemento de crédito de treinta y cinco millones de euros en el presupuesto de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), organismo autónomo dependiente del Ministerio de Agricultura, Nutrición y Medio Entorno, para la adquisición de la finca "Cortijo de Los Mimbrales", situada en el sureste de la Corona Forestal de Doñana (Huelva) y también incluida como tierras agrícolas de regadío en el Plan Singular de Regadíos de esta Corona Forestal.

Con este pacto, a propuesta del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, se persigue hacer un proyecto de restauración hidrológico forestal en la finca, de forma que se restablezca la red de drenaje natural y se restaure su cubierta forestal, pasando de ser una finca agrícola a ser forestal, contribuyendo a solventar el inconveniente del agua en el Parque Nacional de Doñana.

Conforme el Gobierno, el propósito es mitigar la sobreexplotación de acuíferos que proveen de agua a este simbólico espacio natural protegido, motivo que ha hecho que la UE haya abierto una carta de emplazamiento por incumplimiento de la Directiva de Aguas y de Hábitat.

Al adquirir las novecientos veintidos hectáreas de la finca de los Mimbrales se conseguirían con ella seis con ocho hectómetros cúbicos de derechos de la finca para poner a predisposición de las demandas ambientales de la masa de agua subterránea y para reducir las tensiones entre disponibilidad del recurso y demandas socias, produciéndose de esta forma un efecto medioambiental añadido con la posibilidad de reducir el volumen de los transvases demandados por los regantes de la zona.

La explotación de la finca de los Mimbrales genera un efecto isla y causa una clara desconexión entre los nuevos terrenos incorporados al espacio natural y los existentes. La implantación agrícola de la finca dio sitio a una profunda perturbación y modificación del sistema hidrográfico en las superficies ahora agrícolas, produciendo una grave alteración en la hidrología del Parque Nacional de Doñana.

Dicha finca tiene una superficie de mil sesenta y uno hectáreas, dedicadas en la actualidad en su mayor parte al cultivo de cítricos, fresas y arándanos. Tiene quince sondeos a la perfección pertrechados y una extensa red de canales artificiales de drenaje (unos treinta quilómetros), que reemplaza a la red de drenaje natural.

Conforme el Ejecutivo, el valor de la expropiación de la totalidad de la finca supera los cincuenta millones de euros. Sin embargo, y con vistas a su financiación con el Programa Operativo Feder Andalucía, se está examinando la posibilidad de no incluir en la expropiación aquellos elementos que no son de interés para el fin perseguido, con lo que el valor podría reducir.